El plano cartesiano es una herramienta matemática muy simple que se puede construir fácilmente ya que solo está conformada por dos rectas numéricas infinitas perpendiculares entre sí, donde estas pueden estar escaladas de cualquier manera dentro de los números reales, es decir, que pueden ser números enteros o números decimales.
Estas rectas que conforman el plano cartesiano, también llamado sistema de coordenadas, son una recta vertical llamada eje de las ordenadas o ejes de las yes y una recta horizontal conocida como el eje de las abscisas o eje de las equis.
Estas rectas que forman el sistema coordenado de René Descartes, su inventor, obviamente al ser ortogonales entre si y que además se encuentran sobre un mismo plano, se intersectan solo una vez, lo que genera un punto intersección de vital importancia.
Este punto de intersección de las dos rectas infinitas se lo conoce como origen del sistema coordenado, ya que su par ordenado es (0,0).
Es de vital importancia debido a que este es el punto de inicio o de referencia para poder proyectar otro o infinitos puntos dentro del plano cartesiano y de esta manera representar gráficamente cualquier función matemática, entre otras cosas.
De igual manera como se crea este punto debido a la intersección de las dos rectas, el plano es dividido en cuatro cuadrantes donde cada uno de ellos tiene características muy semejantes, pero especificas a la hora hacer la representación de cualquier punto.
Los primeros dos cuadrantes, con respecto a la horizontal, están ubicados por encima de ella, en cambio los otros dos se encuentran por debajo del eje de las abscisas. Con respecto a la vertical, el primer y último cuadrante están ubicados del lado derecho de dicha recta, por otra parte, el segundo y tercer cuadrante están por el lado izquierdo del eje de las ordenadas.